Doce y cuarenta y tres de la madrugada.
Pienso en ti. Tu ridícula facilidad para deslizarte entre mis pensamientos ha vuelto a aparecer. Y de nuevo, no sé lo que quiero, no se lo que quise.
Maldita contradicción la mía. Malditas ansias de saber que es lo correcto.
¡Qué tristoncillaa te veo con lo alegre que eres tú! Aunque de esto ya hace... así que supongo que se te habrá pasado xD I love you bitch!
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